Estaba yo dándole vueltas al tema de la bolsa y las inversiones, y debe haber algo que se me escapa…
Toda la estrategia DGI gira en torno a los dividendos y siempre buscamos empresas que traten bien al accionista, esto es, empresas que pagan dividendos crecientes y que tienen políticas de buyback para que las acciones no se diluyan.
Entiendo los beneficios para el accionista, pero, ¿cuáles son los beneficios para la empresa? ¿evitar OPAs? ¿el propio egoismo de los directivos ya que suelen ser accionistas muy importantes?
A lo mejor es una respuesta muy ingenua, pero ¿no tiene sentido tratarnos bien porque somos los dueños? Como tales, tenemos al menos dos poderes temibles para cualquier directiva: el de tomar decisiones como renovarles o no en la junta de accionistas y, la señal de descontento más importante de todas: vender la acción y hacer bajar la cotización.
Generalmente los altos directivos tienen partidas de sueldo variable en funcion de objetivos y resultados, en muchas ocasiones vinculados al EPS u otros ratios que puedan “medir” la buena marcha del negocio y premiar asi su gestion, asi que tambien puede ser en parte una motivacion personal.
Yo creo que el buen trato al accionista, sobre todo si es persistente, es la mejor demostración de que la empresa va bien.
Incrementar cada año el dividendo o recomprar cada año acciones es una demostración de que la empresa gana de manera consistente más de lo que necesita para crecer.
Y eso significa (o debería significar, porque esto no es una ciencia exacta) que subirá la cotización porque todo el mundo querrá comprar acciones, que tendrá financiación más barata, que las otras empresas querrán hacer negocios con ella, que la gente querrá trabajar en ella, que tendrá mejor reputación, etc…
No nos olvidemos que los pequeños accionistas que entran americanos la mayoría son de mantener las acciones muchos años, hasta su jubilación, y esto a la empresa le interesa, tener una parte de su accionariado mas o menos estable.
Los pequeños accionistas, sobre todo en USA, tienen mas poder del que nos pensamos y eso las empresas lo valoran y por eso lo reconocen con dividendos crecientes y recompras.
