Esto si que acojona:
“La Sección 899 del proyecto permite imponer impuestos adicionales de hasta un 20% a inversores extranjeros en bonos y dividendos de empresas estadounidenses si sus países aplican “prácticas fiscales punitivas”. Según analistas como George Saravelos de Deutsche Bank, esto equivale a “militarizar los mercados de capitales”, restringiendo la inversión extranjera y amenazando la apertura de los mercados financieros de EE.UU. Esta medida podría aumentar los tipos de interés reales, debilitar el dólar y desincentivar la inversión en bonos y acciones estadounidenses, generando preocupaciones sobre el déficit y tensiones en el mercado de deuda fija, con la rentabilidad de los bonos en un 4,35%.”