Me parece una frase y unos ejemplos perfectos para definir la idea.
La cartera y la elección de quienes la componen es algo que cada uno debe hacer en función de sus necesidades. No hay una combinación ideal. Una cartera con Disney, Boeing, AOS, Nike o Visa suena genial pero si es la cartera DGI de inicio para alguien con 50 años pues se queda corta. Todo lo contrario sería si fuera para alguien con 25 años.
Del mismo modo construir una con 4 Reits+ Vodafone+BME+Shell por mucha alta rentabilidad por dividendo me parece una mala cartera, poco fiable.
Cada uno debe elegir como construirla. Yo uso una base de acciones y alrededor de ella tengo otras como Endesa, Bme o Mapfre que me aportan muchos más Euros que la media. Y esos Euros de más me sirven para cuando surge la oportunidad de comprar Apple o Starbucks por poner dos ejemplos.
No hay que renunciar a nada pues uno debe partir de la base de que si selecciona 30 Aristocrats actuales lo más probable es que dentro de 20-25 años al menos 10 de ellos hayan dejado de serlo.
Por eso uno debe coger todos esos elementos e intentar cubrirse de las muchas piedras que nos encontraremos. El excel del punto 2 es demasiado bonito para que salga tan fácil.
Combinaciones hay las que quieran. Yo al margen de la cartera DGI, tengo cartera de revalorización, fondos indexados, fondos growth, PP e inmuebles. Todos aportan y todos tienen un porqué y una función. Y todo está en constante evolución sea porque me lo exige algún impedimento que aparece sea porque quiero aportarle más riqueza y variedad a la estrategia.
Mi siguiente paso es una cartera de compounders. Y como tal tendrá su función. Una especie de complemento o comodín de esta. Renunciar a empresones como Amazon, Alphabet, Facebook o BRK únicamente porque no reparten dividendo me parece un lujo que no me puedo ni quiero permitir. Lógicamente no formarán parte de la cartera DGI pues no reparten dividendo (de momento, que todo se andará) pero será otra pata más que aportará su plus.