Yo hace unos años estuve mirando la compañía (alrededor de 2017), su facturación había bajado pero los márgenes habían mejorado y el EPS permanecía estable. Era prometedor, una empresa de ese tamaño que era capaz de cortar grasa a esos niveles.
Al final de 2017, vi que los gastos operativos eran en realidad planos y eso me mosqueó un poco, porque la facturación era menor y el EPS permanecía relativamente estable que en años anteriores.
Algo no me cuadraba, el CFO debía estar haciendo algo raro o algo de mi limitado conocimiento no me permitía entender que pasaba, así que la dejé pasar, porque a final de 2017 sufrí el dolor de estómago de GE, y mi sesgo por no repetir una caída como la de GE en otra “gran y simbólica empresa patriótica”, mi estómago no podía con otro fiasco así.
El caso es que leo este hilo, porque me interesa aprender de cosas que salen mal, y tratar de entender porque ocurren, cuales son los síntomas que aquejan a una empresa antes de un gran batacazo, y cuanto tiempo tardan en recuperarse.
Con esto, a los que están dentro, no quiero condicionarles a tener peor opinión de la cual tienen ahora por el “dolor de estómago” que la pérdida provoca, pero es que creo que esta empresa nos puede enseñar muchas cosas.
Lo primero es que hay que estar atentos a la capacidad de mejora de la operativa: o creces, o mejoras los resultados operativos. Sino a la larga estás en mal sitio. En empresas cíclicas esto es muy complicado de averiguar, ya que los propios ciclos enmascaran situaciones que por el propio negocio se pueden disfrazar de otra cosa. Pero a largo plazo esto no se puede esconder, y creo que es una de las cosas que está sobreinfravalorando a Bayer.
En estrategia empresarial, hay un autor que se llama Robert L Martin y que dice en uno de sus libros que hay 3 grandes errores estratégicos en las empresas. El segundo de ellos es hacer una gran adquisición cuando en realidad lo que deberías hacer es “limpiar la casa” y arreglar tus problemas. Apunta dos razones: 1) pagas mucho por una buena adquisición, 2) los problemas persisten, y no es lo peor, la incapacidad de la directiva a afrontar el arreglo de esos problemas porque es más bonito cuidar de la nueva adquisición.
En el libro pone como ejemplo a P&G, que en los '90 se dedicó a comprar empresas como locos y al final seguían con los mismos problemas.
También es cierto que cuando un bache tan gordo en el consumo como el de 2020 tira al suelo los precios de todos, lo que ocurre es que los que están en peor forma lo sufren más, y claro a Bayer, que compró Monsanto en 2018 (espero no haberme equivocado), esta adquisición parece estar matándolos.
Mi pregunta es, ¿no estamos sufriendo de miopía al apuntar a Monsanto como el principal problema de la empresa? Porque es un empresón con muchas y buenas cualidades que siguen intactas. Yo he trabajado con DuPont como proveedor, y ellos miran a Bayer en ciertos sectores y son intratables, imposibles de igualar.
¿no será que la empresa tiene otros problemas y la directiva los tiene escondidos debajo de la alfombra?
A los que siguen esta empresa de cerca, y tienen datos frescos en su cabeza, ¿las unidades de negocio están siendo capaces de mejorar sus márgenes operativos de verdad? O siguen a la deriva.