Me gustaría regalarle a mi primer ahijado un fondo o un etf global de acumulación para ir metiéndole en fechas destacadas un dinero año a año hasta que pueda el continuar la cartera. Digamos que sería como para el hijo que no he podido tener. En mayo es su bautizo y es lo más útil que se me ha ocurrido.
Estaba pensando en un Etf global de renta variable (aprox. 30% usa, 20 europa, 20 asia, 10 emergentes y 10% oro) de acumulación (para no darle trabajo a sus padres de declaraciones de renta) y muy bajas comisiones.
Qué casualidad, a mi también me hicieron padrino y le he hecho chantaje emocional a los padres, en especial al padre que es mi amigo y le he dicho que si no le abre una cuenta en Myinvestor para yo hacerle transferencias y qué él haga las compras, la niña se queda sin regalos para siempre.
Mi ideal es el Global que comenta iguerrero y a dormir, ojalá yo hubiera tenido un padrino como yo.
Hola aqui uno mas creando carteras para nuestros peques yo voy a optar por un Vanguard global en MyI tambien.
Por cierto para incentivarlos a que lean los estoy haciendo un truco porque son muy perezosos para leer y a mi me encanta les he dicho venga con el primer libro que leais os abro una cuenta de valores y os ingreso 150€ y a partir de ay cada libro que leais os ingreso 5€ y ahí estamos haber que conseguimos .
Saludos
Mi experiencia es que si les pagas x leer, luego tendrás que pagarles x cualquier cosa que tú quieras que hagan.
Se llama extorsión!
En estas cosas el camino difícil y largo es siempre mejor. Lee tu. Léeles tu. Muéstrales porque un libro es útil o entretenido e interésate sobre que es lo les interesa a ellos y comprarle libros sobre eso.
Bueno es complicado yo intento verlo desde el lado positivo,vivimos tiempos dificiles y con tanta tecnologia dispositivos moviles cuesta controlarlo y de esa forma intento motivarlos para algo bueno.lo veo como una recompensa.
Yo leo a diario pero ni con esas consigo que los niños lean sin motivarlos en fin quizas me equivoque pero bueno.
Saludos
No sé qué edad tendrán. Con los míos leer fue una prioridad y a los 4 al menos los dos más grandes ya leían. El más grande ya leía solo.
Entonces empezamos con cosas en la tele de animales. Luego libros de animales. Dinosaurios, fuimos a Dinopolis. Ya se iba el grande con 5 o 6 con su libro a ver si encontraba este o aquel dinosaurio. El peque detrás.
Luego pasó etapa. Pero una vez al mes o cada 2 meses los llevo a la biblioteca. Se traen 4 o 5 libros cada uno. La más peque con 3 incluso imita como si leyera.
Ya hace 6 meses que no lo hago, pero ya nos leímos el hobbit y 3 libros de harry. Más bien los leo yo, ellos durmieron el 40%. Pero es parte de mi estrategia. Comparten habitación los 3. Ya llegará el bb y serán 4. Pero de nuevo es parte de mi estrategia. Leer es una cosa que cuando los papás lo hacen ellos se sientan y escuchan.
En casa hay todo tirado. Pero sobre todo pilas de libros. Da igual que le presten atención por días y días. Son semillas. Un día vienen y te dicen “pa me lees este?”. El más grande lee al ratón Stilton. El más pequeño ahora tmb, por ósmosis. El más pequeño ahora está contento porque lo “ayudó mucho” a superar sus miedos (yo les digo que hay que enfrentar al miedo, la casualidad que uno de los libros habla del valor). Yo ya sé que esos dos ya están encaminados. Ahora me toca con la pequeña. Empiezo antes igual. El bb ya agarra libros me los trae y se sienta, en plan “leerme adulto!” A mí me da mucho palo, sinceramente, aparte estoy así hace casi 10 años (9,7,3 y 1). Pero persevera y triunfarás (?). La de 3 el truco es x la noche mientras los otros leen solos usar los libros que tienen letras y figuras de objetos y tu lees y ellos completan con la figura. Y libros que tengan las letras que asignen en infantil (suele ser mayúsculas) y jugar al ahorcado y escribir los nombres de toda familia mil veces.
En fin. Semillas. Ya después de grandes si leen o no, nada puedes hacer al respecto. Es decisión de ellos.
Fuerza. No te juzgues. Persevera. Y busca lo que funciona en tu caso y lo que a ellos les interesa.
Me parece genial todo lo que dices la verdad a mi me encanta la lectura desde pequeño pero yo con mis hijos no he conseguido engancharlos a la lectura la verdad.
Mis hijos tienen 13,11,y 4. Desde pequeños le he leido cuentos les he ofrecido todo tipo de libros pero, como digo, algo he echo mal que no he conseguido que sean lectores. Tienen carnet de la biblioteca, los llevo de vez en cuando a por libros. De hecho ahora tiene la mayor “La historia interminable” un libro que a mi me encanto cuando lo lei de pequeño. El de 11 tiene “Harry Potter 1” y tengo que estar todo el dia encima de ellos para que lean.
Por eso he iniciado esta iniciativa de ahorrarles dinero a cambio de leer .
Bueno dejamos este offtopic que este hilo no es para esto.
Saludos
Perdona que te voy a dar la paliza por un curso de Coursera que hice en su día. En el aspecto más personal: El tema de premios me ha funcionado muy bien a mí.
La idea es estructurarlo en objetivos a corto (leer x páginas), medio (leer X días por semana) y largo plazo (llegar a la mitad del libro, acabarlo,…). Los premios pueden ser cualquier actividad que le guste, no necesariamente tiene que ser algo material. Naturalmente se hacen los premios proporcionales a lo conseguido.
Importante: Cuando el/la peque haga algo bien, abrazo fuerte, besos, alegría y reconocimiento. Coméntalo con tu pareja, que lo oiga y que sienta que ha hecho algo muy bien.
Importante: No mezclar el reconocimiento con el comentario de " has hecho bien, pero…". Esto rompe el efecto que se intenta conseguir.
Ser flexible, si el peque no ha cumplido por poco dar el premio igualmente.
Con el tiempo, la necesidad del premio va desapareciendo y un día descubres que ha abierto un cómic y lo está disfrutando o que le has regalado un libro y se lo ha leído.
El enlace al curso, en su día hice la parte gratuita y sin trabajos entregados.
Soy escéptico con las recompensas, porque creo que pueden ser contraproducentes. Si la lectura no se ve en sí misma como la recompensa, la cosa no tiene sentido y el fuego se acabará apagando.
En este sentido, pienso que lo más adecuado sería ofrecerles libros sobre temas que creamos que les gustarán e interesarán, permitiéndoles abandonar la lectura sin remordimientos:
“Si un libro no te atrapa, tíralo lo más lejos de ti. Te está impidiendo llegar al que sí.
El libro no estaba para ti y tú no estabas para el libro.”
Considero fundamental liberarles de la obligación de terminar un libro que no disfrutan. Nuestra labor debe centrarse en simplemente animarlos a seguir explorando hasta que encuentren el que sí.
Es crucial dejarles claro que abandonar un libro no significa que no les guste la lectura, ni es un fracaso. Un libro solo cobra valor cuando establece una conexión íntima con el lector.
Con este enfoque la lectura deja de ser tarea impuesta por una recompensa externa para convertirse en el alimento que buscas porque sientes hambre.
Sin embargo, siendo realistas, hay que reconocer que la predisposición hacia la lectura varía significativamente entre los niños. Y encontrar ese libro “de calidad” que realmente encienda la chispa a veces requiere más de buena suerte y de la propia naturaleza del niño que de la guía que podamos darles los padres.
Comparto tu opinión. Pero añadiría una cosa: a veces hay que dar empujones ya sea con premios (refuerzo positivo) como con castigos (refuerzo negativo) para crear un hábito.
A base de repetir rutinas incluso de cosas que no nos gustan, se consigue que lo que no nos gusta nos cueste cada vez menos de hacer. E incluso nos puede llegar a gustar. Sea leer, lavarse los dientes, ducharse, etc.
No se trata de forzar al máximo (cuánta gente odia el Quijote o la Regenta porque les obligaron a leerlos?) se trata de crear hábitos.
Yo siempre leía muchísimo… hasta que en el instituto nos obligaron a leer novelitas de adolescentes cutres y algunos supuestos “clásicos” que no eran para mí, ni creo que lo fueran ahora. A partir de ahí dejé de leer durante un tiempo porque acabe hasta las narices, y “perdí el hábito”. No creo que a los que no leían nada los engancharan con esas lecturas obligadas pero a mí y a otros que sí lo hacíamos “nos perdieron”.
Estudiando la carrera retomé la lectura más o menos en serio, pero nunca al nivel anterior a lo que comento. Ahora leo menos de lo que me gustaría por trabajo etc, es algo que me gusta hacer y tengo mil libros pendientes, pero en ese momento ya era consciente de que me habían fastidiado el placer que sentía por la lectura.
La idea de todo el sistema es arrancar el motor y generar un hábito. Naturalmente tiene que ser una lectura a su nivel y que disfrute de ella. Si tiene pequeños premios intentará llegar a ellos y si la lectura se le hace muy cuesta arriba, se cambia. Todo esto es dinámico.
No se trata de sobornar al niño para que se lea “El inversor inteligente”. Bastantes veces del premio lo que más disfrutan es que les hayas prestado atención y felicitado. Están cableados para intentar agradar a sus padres y aprenden conductas de esta manera.
Yo he de decir que soy de los pocos raros que me pasó un poco al revés.
Me gustaba leer, pero me cansé rápido de la literatura fantástica/adolescente. No me gustaban las lecturas obligatorias, pero… de casualidad cayeron en mis manos unos cuantos clásicos que me gustaron. Becquer, el Lazarillo de Tormes, tenían su aquél, y entonces me mandaron Crónica de una muerte anunciada, y ahí ya comprobé que podía leer literatura adulta y retomé la lectura. En segundo de bachiller, en literatura universal, me encantaron los rusos, raro que es uno